¿Quieres empezar a correr? Evita estos 6 errores de principiantes
Correr es una actividad muy natural de la cual podemos sacar enormes beneficios para la salud; pero se convierte en todo un reto cuando, más que por el ejercicio, nos vamos proponiendo retos en distancias o tiempos.
Si deseas o estás entrando al aventurado y emocionante camino del running seguramente leer estos consejos te caerá perfecto, pues te evitará abandonos o lesiones futuras. ¡Sigue leyendo!
Mala alimentación
Puede que a veces, con el ritmo de vida acelerado, subestimemos el poder de una buena alimentación, pero es solamente cambiando nuestros hábitos alimenticios que podremos romper nuestros récords gradualmente.
Con una dieta saludable conseguirás mejores resultados, nunca dudes de ello, por eso sé constante y disciplinado en este aspecto.
Recuerda que la hidratación también juega un papel vital, sobre todo en tiempo de calor, la falta de líquido podría derivar en deshidratación y otros problemas de salud más graves.
Más dolor = más esfuerzo
Creer que “entre más dolor, más esfuerzo” es una frase con la que debes tener cuidado, pues no es verdad, si al correr sientes alguna incomodidad que te impide el paso significa que algo no va bien.
Hay que saber distinguir entre una molestia muscular por poca costumbre al ejercicio o una lesión que tiene que ser atendida y, en ese momento, señal de alarma de que debes detenerte.
Dormir poco
Descansar lo suficiente es parte fundamental de los entrenamientos y eso se tiene que concebir claramente desde el inicio en el camino del running.
Esas horas de sueño son imprescindibles para la recuperación del cuerpo y su adaptación a un nuevo hábito, saltarlas o no hacerlas adecuadamente puede provocar lesiones o contratiempos a causa del entrenamiento excesivo.
Lo recomendable son 8 horas al día… así que, ¡a dormir se ha dicho!
Entrenar sin ritmo disciplinado
En ocasiones algunas personas que se inician en el running corren 3 días seguidos y descansan otros 5, luego vuelven a entrenar otros 3 y descansar 5; este paso no permite que el cuerpo se acostumbre a un entrenamiento óptimo, por ello cuando vuelvas a correr una tirada larga tu rendimiento habrá bajado.
Como principiante lo ideal es correr 3 veces por semana con descansos de 1 día entre los entrenamientos, por ejemplo: lunes, miércoles y viernes.
Comenzar a correr sin calzado adecuado
Los entrenamientos de fondo son exigentes, siempre se debe tener ello en mente.
Salir a entrenar con un calzado adecuado a tus necesidades, más que una cuestión estética, es protección para tu cuerpo, para ello es necesario conocer tu tipo de pisada.
Correr en asfalto es radicalmente diferente a hacerlo en caminadora, ¡tómalo en cuenta! y consigue un buen par de tenis que te acompañen y cuiden en cada tirada larga.
No calentar
Calentar predispone al cuerpo para un mayor esfuerzo, así, disminuye el riesgo de sufrir lesiones y te puede ayudar a conseguir una nueva marca personal, por lo cual ya debería formar parte habitual de tu entrenamiento.
Algunos estudios han mostrado que un calentamiento adecuado ayuda a tu cuerpo a resistir más estrés al movimiento y mejorar la concentración, pues aumenta la velocidad de reacción.
El running es un estilo de vida saludable y divertido que, como cualquier otra disciplina, exige tiempo y esfuerzo, pero recuerda que la recompensa está en los frutos de superarte cada vez más a ti mismo. ¡Ánimo, corredor!
Apóyate en tu alimentación con productos saludables y nutritivos como nuestras avenas instantáneas, recuerda que siempre estarán a tu alcance en cualquier supermercado.
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